
Con una carrera marcada por éxitos, como la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Río 2016 y la medalla de bronce en Pekín 2008, Pareto se ha consolidado como una de las figuras más destacadas del judo argentino. Su elección al COI es un reconocimiento a su dedicación, perseverancia y liderazgo en el deporte.
Además de su destacada carrera como atleta, Pareto se ha convertido en una defensora de la participación femenina en el deporte, rompiendo barreras y abriendo camino para que otras mujeres sigan sus pasos. Su logro en París 2024 es un ejemplo inspirador para todos aquellos que buscan alcanzar la excelencia en su campo.
La pequeña gigante del judo argentino ha demostrado una vez más que, con determinación y pasión, se pueden alcanzar metas históricas. Su legado seguirá inspirando y motivando a futuras generaciones de atletas, dejando una huella imborrable en el mundo del deporte.