El concejal Pablo Daguerre presentó un proyecto urgente para que el Gobierno Nacional incorpore la financiación de la Autopista Paso Urbano. La obra, considerada una «conexión vital» para el desarrollo portuario y logístico de toda la región, lleva meses paralizada y su exclusión del Proyecto de Ley de Presupuesto 2026 aumenta la preocupación por su continuidad.
La obra de la Autopista Paso Urbano, un proyecto vial de infraestructura crítica para Bahía Blanca y el Sudoeste bonaerense, enfrenta una nueva amenaza de paralización indefinida. Según denunció el concejal radical Pablo Daguerre (UCR/Juntos), el Gobierno Nacional omitió incluir las partidas necesarias para su reactivación en el Proyecto de Ley de Presupuesto Nacional 2026, que actualmente se debate en el Congreso de la Nación.
Ante la inminente exclusión, Daguerre presentó un proyecto en el Concejo Deliberante local solicitando la inmediata incorporación de la Obra Autopista Paso Urbano, que se encuentra bajo la órbita de la Dirección Nacional de Vialidad (DNV), para garantizar su continuidad.
Una Obra Estratégica en Suspenso
El Paso Urbano es mucho más que una simple mejora vial. La infraestructura busca transformar en autopista un tramo de 11 kilómetros de las Rutas Nacionales 3 y 33, en la zona suroeste de Bahía Blanca, extendiéndose desde la Rotonda de Bosque Alto hasta la intersección con la RN 3 Sur, incluyendo el complejo distribuidor en el paraje El Cholo.
Su importancia radica en su rol como articulador logístico fundamental: conecta directamente la vasta producción agrícola de la región con el Puerto de Bahía Blanca, uno de los principales de aguas profundas del país. Además, es un nudo de tránsito neurálgico que diariamente es utilizado por más de 20.000 vehículos.
“Bahía Blanca necesita que el Paso Urbano se reactive. No es una obra más: es una conexión vital para la ciudad y para el país”, subrayó el concejal Daguerre, quien ha impulsado esta preocupación en una agenda común con otros ediles de la Sexta Sección Electoral, buscando un desarrollo y conectividad más sólidos para el Sudoeste bonaerense.
Historia de Paralizaciones y Deterioro
La advertencia de Daguerre se suma a una historia de demoras y frenos en un proyecto que se licitó originalmente en 2017 y cuyo plazo de ejecución se estimó en 24 meses. Aunque en períodos anteriores (especialmente entre 2022 y 2023) se llegó a considerar una de las obras viales de mayor presupuesto de la Argentina, su ejecución se interrumpió, quedando su avance en un aproximado del 43% de concreción, según reportes de principios de 2025.
El edil recordó que incluso con modificaciones posteriores para hacerla «más viable» tras la reevaluación de las autoridades actuales, no se registraron avances concretos. La falta de financiamiento y la posterior omisión en el Presupuesto 2026 generan una profunda incertidumbre.
El concejal también señaló el creciente problema de seguridad vial y transitabilidad que genera el deterioro de la traza actual, una consecuencia directa de la paralización de los trabajos. La falta de mantenimiento y el paso del tiempo, con la erosión de los terraplenes, representan un riesgo para los miles de usuarios diarios.
El Reclamo: Deuda Pendiente y Desarrollo Nacional
El proyecto presentado por Daguerre busca presionar al Gobierno Nacional para que retome el financiamiento de esta infraestructura considerada “esencial para el desarrollo del país”. La iniciativa de la UCR local busca apoyo en las figuras de la Diputada Nacional Karina Banfi y el Senador Nacional Maximiliano Abad, para llevar el reclamo a las más altas esferas del Gabinete Nacional.
La preocupación se extiende más allá del Paso Urbano, ya que el concejal también advirtió sobre la ausencia de partidas específicas para el Distrito 19 de Vialidad Nacional, con jurisdicción en rutas clave como la 3, 22, 33 y 35, todas vitales para la conexión de Bahía Blanca. El reclamo se alinea con advertencias de gremios viales, que también han manifestado su preocupación por la falta de actualización presupuestaria para la DNV.
«La continuidad de esta obra no sólo es una deuda pendiente con Bahía Blanca, sino una inversión esencial para el desarrollo productivo, portuario e industrial de toda la región», concluyó Daguerre.
